Si una persona además de usar gafas, algo muy común en la sociedad actual, no tiene por costumbre ejercitar los músculos de los ojos, la visión irá disminuyendo paulatinamente. Está demostrado que el uso de gafas, aunque para muchos es vital ante la imposibilidad de ver correctamente, a la larga disminuye aún más la calidad de la visión.
El problema es que no nos enseñan a hacer ejercicios que nos podrían ayudar a evitar gran parte de la pérdida de visión. Es más fácil vendernos unas gafas nuevas cada vez que nuestra vista cambia, o recomendarnos operaciones costosísimas, a las que no todo el mundo puede acceder. Los oftalmólogos, no nos informan de que poseemos unos músculos en los ojos que debemos fortalecer, al igual que hacemos ejercicio con cualquier otro músculo del nuestro cuerpo, y que, si los ejercitáramos a diario, nuestra visión se mantendría más estable que con el uso de gafas, que lo que hacen es hacer vagos a nuestros ojos.
Es indudable que en una sociedad que vive pegada a la pantalla de un monitor o dispositivo, se haga cada vez más necesario aprender a cuidar del estado de salud de nuestra vista; el desgaste al que la sometemos a diario es tan grande que, si no lo hacemos, es inevitable la alta degradación que sufrirán nuestros ojos con el paso de los años.
Para reponer la visión, desde Solnaturaleza recomendamos seguir esta serie de consejos:
- No forzar la vista y cada dos tres horas, cerrar los ojos durante algunos minutos para relajarla y descansarla.
- Reducir en la medida de lo posible el uso de gafas.
- Hacer algunos de los ejercicios que se muestran en la siguiente imagen con los ojos:
- Masajear diariamente los siguientes puntos que afectan a nuestra vista aplicando una ligera presión sobre ellos con las puntas del dedo índice y medio, sin ejercer fuerza, ya que no debe doler:
- Cuando estemos al aire libre, trataremos de fijar nuestra vista lo más lejos posible, lo que hará que nuestros ojos descansen.
- Incluir en nuestra dieta diaria el consumo de zanahorias, con dos gotas de aceite de oliva.
- Enjuagarnos los ojos con agua tibia.
- Debemos evitar el uso de ordenadores o monitores por lo menos dos horas antes de dormir.
- Centrar la mirada en un punto específico como, por ejemplo: un punto de luz, un punto oscuro, o un objeto pequeño, etc.
- Concentrarnos en un objeto o imagen y fijar la mirada por unos instantes evitando pestañear y retener algún pensamiento. Con este ejercicio, fijaremos la vista todo lo que aguantemos, antes de que los ojos empiecen a lagrimear; si esto sucede, cierra los ojos y deja que descansen.